En España, existen varios delitos que se pueden cometer en relación con los accidentes de tráfico, entre los cuales se encuentran:

1. Conducir bajo los efectos del alcohol o las drogas: Esta conducta se considera un delito penal y puede ser sancionada con penas de prisión, multas y la retirada del carnet de conducir.
2. Conducción temeraria: Se considera conducción temeraria cuando el conductor pone en peligro la vida o integridad física de las personas, ya sea por exceso de velocidad, adelantamientos imprudentes, maniobras peligrosas u otras conductas similares.
3. Omisión del deber de socorro: En caso de accidente, el conductor tiene la obligación de prestar ayuda a las víctimas y de alertar a los servicios de emergencia si es necesario. La omisión de este deber constituye un delito.
4. Homicidio o lesiones por imprudencia grave: Si el accidente de tráfico causa la muerte o lesiones graves a otra persona, y se demuestra que el conductor actuó con imprudencia grave, puede ser acusado de un delito de homicidio o lesiones por imprudencia.
5. Fuga del lugar del accidente: Si el conductor abandona el lugar del accidente sin prestar ayuda ni facilitar sus datos, comete un delito conocido como «fuga del lugar del accidente».

En caso de ser víctima de uno de estos delitos, es importante buscar asesoramiento legal para conocer tus opciones de reclamación y proteger tus derechos. Los despachos de abogados especializados en accidentes de tráfico pueden ayudarte a obtener la compensación que mereces y a hacer frente a las consecuencias legales del delito cometido.